
Martín Isidoro
Santa Coloma Lezica

(1800 – 1852 )
Era hijo de Ana María de Lezica, casada con Juan Antonio de Santa Coloma, quienes tuvieron en total 13 hijos, entre ellos Eugenio y Martín Isidoro de Santa Coloma.
Santa Coloma se unió al ejército de Buenos Aires en 1824 en el cuerpo de los Blandengues de la Frontera, unidad de caballería especializada en la lucha contra los indígenas. Fue juez de paz y también miembro de la Sala de Representantes de su provincia, adhiriendo al partido federal
En marzo de 1842, Santa Coloma derrotó al gobernador de Santa Fe Juan Pablo López, que se había unido con los unitarios y pocas semanas después, nuevamente en Colastiné. El gobernador huyó hacia Corrientes, mientras Santa Coloma y Oribe tomaban la ciudad de Santa Fe. Santa Coloma quedó a cargo de las tropas porteñas y santafesinas.
A fines de junio de 1845, Juan Pablo López partió de Corrientes y, cruzando el Chaco, derrotó a Santa Coloma en Calchines, cerca de Santa Fe. El porteño resultó gravemente herido y se retiró con dificultad hacia el sur donde esperaron la ayuda porteña. El 12 de agosto de 1845, nuevamente derrotó a Juan Pablo López en Malabrigo.
Durante el bloqueo anglo-francés del Río de la Plata, Santa Coloma dirigió la defensa de la costa de San Lorenzo contra las incursiones de la flota enemiga, en particular en la Batalla de Punta Quebracho donde combatió como segundo del general Mansilla. Luego organizó una guarnición permanente en San Lorenzo
Santa Coloma mandó una división de caballería en la batalla de Caseros, el 3 de febrero de 1852. Después de la derrota, se refugió en la iglesia de Santo Domingo. El abogado unitario santafesino Francisco Seguí, quien sostenía que Santa Coloma le había robado una novia, con permiso de Urquiza lo hizo traer ante su presencia al día siguiente y lo hizo degollar.